jueves, 9 de diciembre de 2010

FELIX

Hará más o menos veinte años que me faltas. No veo ni tus manos, ni tu mirada, no veo ese vasito de tinto siempre a medio llenar, ni tus crucigramas cuando el Betis juega. No veo tu batín medio abierto sobre los hombros que ahora son míos.

Entiendo cuando me enseñaste, siendo muy pequeño que no hubo ni rojos ni fascistas en la guerra sino desgracia de hermanos matándose entre sí, y veo esa misma desgracia cada vez que enciendo la televisión y escucho a los miserables políticos enfrentando a sus descendientes por poder y dinero.

Siento tu risa cuando me hacen cosquillas, siento tus ganas de picar al que está más cerca, siento tu guasa y tus malas reacciones en mis carnes y en los de mi alrededor.

Sí que veo tus pecas en el espejo, y tus golpes en la puerta al llamar, tu genio (según dicen) tu respeto a la opinión contraria, tus brazos cada vez que nado y tu pecho cuando me descamiso. Siento tu mano cogiéndome del cuello cada vez que pedaleo y tus consejos sobre lo delicada que es una mujer.

Veo tu carácter cuando miro a mi espalda y estoy solo, también veo tus despertadores sonando en mi pecho y veo tus medallas desgarrándome mi jersey como lo hacen las lágrimas cada 10 de Diciembre desde hace un porrón de años.

Y no dejaré de derramarlas porque así estoy contigo, no te puedes imaginar cómo te añoro abuelo.

martes, 19 de octubre de 2010

PRÓLOGO

Devuélveme, pues, también, aquellos tiempos en que yo
mismo estaba en flor, en que un copioso manantial de cantos
nacía de nuevo sin cesar, en que las nieblas me velaban el
mundo, en que el capullo me prometía aún maravillas, y
cogía yo a miles las flores que con profusión llenaban todos
los valles. Nada tenía entonces, y sin embargo, tenía lo
suficiente: afán de verdad y placer en la ilusión. Tórname
aquellos indómitos impulsos, aquella íntima felicidad llena de
dolor, la fuerza del odio, la potencia del amor; ¡devuélveme
la juventud!

Pues bien, éste es un fragmento tomado del prólogo del Fausto de Goethe. En él, el Autor expresa la sensación del paso inexorable del tiempo, 'Tempus Fugit', acuñado por Virgilio y que, más tarde, los románticos adoptaron para representar la lucha de un hombre ante la realidad miserable y materialista coetánea, porque, todo tiempo anterior fue mejor... o no?

Lo cierto es que el hombre tiende a recordar siempre los buenos momentos, idealizarlos e intentar dejar aparte las frustraciones pasadas que harían de nuestro presente más... patético.

Pero, ¿es esto un modo de autodefensa? ¿o un pequeño error en el largo camino de nuestra evolución?

Quizá esta jugarreta de la memoria ayude a nuestra felicidad, pero lo que sí es cierto es que nos permite disfrutar una y otra vez de los errores que ya anteriormente hayamos cometido, aún habiendo tenido malas experiencias... ¿o es que estas experiencias no han sido lo suficientemente malas?

A pesar de ellas, desearía volver, volver a aquel momento en que cada segundo de tu ausencia destrozaba algo en mi interior, porque absolutamente todo mereció la pena, aunque que cada vez recuerdo menos ciertas cosas.

jueves, 19 de agosto de 2010

Pesadilla

Hoy siento que aún sigo enamorado, siento cómo aún tu sexo está caliente, hoy he sentido que pertenecías a otro hombre, no es el sentimiento de odio hacía ese afortunado es la pena la que me corroe por dentro al ser ese mi amigo.

Ay amigo afortunado! que me haces sentir tan desgraciado.

Jamás entenderé por qué lo hiciste, jamás te perdonaré del todo, jamás te retiraré mi cariño. Ya eres mi hermano puesto que has disfrutado de mi mismo placer.

A quien no perdonaré es a ti zorra desgraciada que tratas de conserguirme, de captar mi atención sintiéndote deseada por otro al que quiero y haciéndome sentir así.

¿tan poco te valoras? ¿no hay más tíos a los que follar?

Eres rastrera, mujer arrástrate guarra ensucia tu pecho y todo lo que Dios te ha permitido ser.

viernes, 12 de marzo de 2010

No te quiero

No te quiero ver más, tú, que haces mis días interminables, mis pensamientos tristes y mis miserias aún más miserables, ¿Cuántas veces me has privado de grandes momentos destrozando planes, esperanzas e ilusiones?

Húmeda puta no cales más aún mis huesos, busca otro al que arruinar, desdicha a los que han olvidado tu daño.

Por tu culpa me recluyo en mi casa, por tu culpa mi ánimo se esconde, por tu culpa tengo que poner a secar mi alma.

Adiós lluvia

miércoles, 3 de febrero de 2010

Sueño

Esta noche he sentido tu mirada acariciándome con tus grandes ojos, la comisura de tus labios asomando una sonrisa, he sentido tus besos, tus dedos jugando con mi boca, hoy me he sentido vivo recuperando el amor que un día me diste.

¿cómo desprecié el amor que me pudiste dar y por lo que, siempre, toda la vida me sentiré culpable?, ¿por qué no lo recuperé?, ¿por qué no pude disfrutar para siempre de aquello?.

Te recuerdo bastante a menudo, siempre lo he hecho desde que te conocí, pero esta noche he estado contigo, sombras de algo que pasó hace 10 minutos y que, tristemente se van desvaneciendo dejando únicamente los recuerdos reales, los que compartimos tú y yo.

Ahora la tristeza me invade al darme cuenta de que todo fue un sueño.